Bueno, al final he conseguido bajar bien las escaleras y no rodando jeje,,que tenía un poco de miedo a eso por que por estas escaleras ha rodado casi todo el mundo y yo no, toquemos madera,,jej; Iba a bajar sola con mamá pero al final nos dio un poco de miedo por si dábamos algún traspiés o algo y llamamos a mi amiga y vecina Marta y bajamos muy bien, me costo menos trabajo que subir y yo pensaba que iba a ser mas difícil. Como el experimento ha salido bastante bien lo repetiremos a menudo que además es buen ejercicio para mi cerebro y para mis piernas.
Ayer tocó de nuevo dentista, tengo una muela rebelde que me salta siempre los brakers y han tenido que ponerme una banda, yo no sabia que era eso y es como un anillo que se pone en la muela, lleva el brakers incorporado y se sujeta mejor el alambre, pero vaya día que pasé , apenas pude comer y hoy estaba muerta de hambre, o como decimos por aquí " estaba enmayá" . Se que ahora voy a tardar algo más en habituarme a esto pero espero que para la cena de Navidad este ya bien.
Era algún dia de Octubre del año 2007. Deperté de un largo y extraño sueño de dos meses. Comprendí que ya no dormía porque empecé a preguntarme quién era yo, como me llamaba, si tenía familia, cuáles eran sus nombres,... No sabia donde estaba ni como habia llegado allí. No podía ver, ni hablar, ni apenas moverme, pero sí que podía sentir y pensar. Estaba atrapada en un cuerpo que no me repondía. Quería preguntar y decir lo que sentía pero me era imposible, sólo podía llorar de impotencia.
La voz de mi madre me ha guiado, durante los cuatro últimos años, a lo largo de un amargo itinerario de hospitales, ciudades desconocidas, operaciones y dolorosos tratamientos. Y, sobre todo, me ha ayudado a reencontrar la esperanza y superar mi deseo de morir. Actualmente, he recuperado parte de mis facultades y sigo luchando por mejorar.
Escribo este diario por necesidad. Porque necesito comprender mejor lo que me ha ocurrido y compartirlo. Y porque necesito ayuda para continuar con los duros y costosos tratamientos que son mi única esperanza de recuperación. Un comentario de apoyo o cualquier información de tratamientos o terapias alternativas tienen para mí un extraordinario valor, me dan la energía que necesito para seguir luchando.
Espero que podáis aprender algo de mi diario. Muchas gracias.
La voz de mi madre me ha guiado, durante los cuatro últimos años, a lo largo de un amargo itinerario de hospitales, ciudades desconocidas, operaciones y dolorosos tratamientos. Y, sobre todo, me ha ayudado a reencontrar la esperanza y superar mi deseo de morir. Actualmente, he recuperado parte de mis facultades y sigo luchando por mejorar.
Escribo este diario por necesidad. Porque necesito comprender mejor lo que me ha ocurrido y compartirlo. Y porque necesito ayuda para continuar con los duros y costosos tratamientos que son mi única esperanza de recuperación. Un comentario de apoyo o cualquier información de tratamientos o terapias alternativas tienen para mí un extraordinario valor, me dan la energía que necesito para seguir luchando.
Espero que podáis aprender algo de mi diario. Muchas gracias.