Era algún dia de Octubre del año 2007. Deperté de un largo y extraño sueño de dos meses. Comprendí que ya no dormía porque empecé a preguntarme quién era yo, como me llamaba, si tenía familia, cuáles eran sus nombres,... No sabia donde estaba ni como habia llegado allí. No podía ver, ni hablar, ni apenas moverme, pero sí que podía sentir y pensar. Estaba atrapada en un cuerpo que no me repondía. Quería preguntar y decir lo que sentía pero me era imposible, sólo podía llorar de impotencia.
La voz de mi madre me ha guiado, durante los cuatro últimos años, a lo largo de un amargo itinerario de hospitales, ciudades desconocidas, operaciones y dolorosos tratamientos. Y, sobre todo, me ha ayudado a reencontrar la esperanza y superar mi deseo de morir. Actualmente, he recuperado parte de mis facultades y sigo luchando por mejorar.
Escribo este diario por necesidad. Porque necesito comprender mejor lo que me ha ocurrido y compartirlo. Y porque necesito ayuda para continuar con los duros y costosos tratamientos que son mi única esperanza de recuperación. Un comentario de apoyo o cualquier información de tratamientos o terapias alternativas tienen para mí un extraordinario valor, me dan la energía que necesito para seguir luchando.
Espero que podáis aprender algo de mi diario. Muchas gracias.

sábado, 25 de enero de 2014

             El  otro día iba tan contenta, visita al máxilo y seguro que me dan la cita para la operación y mi gozo en un pozo, lista de espera y a esperar que me avisen, ahora a mirar cada día el correo a ver si llega la dichosa carta con la fecha, esto es peor aun porque ni puedes hacer planes ni nada. No es que mi vida social sea muy activa, que digo ..no es nada activa,  pero me gusta saber al menos las fechas de las cosas importantes para poder ir haciendome a la idea y que uno tiene que depilarse, ir a la peluquería y esas cosillas jejeje que luego con los pijamas que te dan en el hospital lleva uno todo al aire jeje.
      Poco más que contar por aqui, bueno si..el fin de semana pasado estuve cenando en casa de unos amigos y nos juntamos unos pocos de los de antes y la verdad es que me lo pase muy bien recordando anécdotas y trastadas de cuando eramos pequeños y no tan pequeños, cosillas de las que hacemos todos sin mala idea  y que cuando pasa el tiempo te ríes al recordarlas, creo que a todo el mundo cuando se junta con sus amig@s del colegio le pasa lo mismo y si nos juntamos veinte veces siempre acabaremos hablando de las mismas historias con cariño y nostalgia de ese pasado en el que era tan fácil ser feliz.
     Con estos fríos nos movemos poco de casa, sólo lo justillo,,,dentista el martes y a Córdoba el jueves, este fin de semana pensabamos ir al caballo pero aun nos queda restos de esa gripe tan tonta que no termina de irse la tos y lo de dormir  bien lo llevamos complicado.
         Bueno, voy ha echar un rato de leer con mi primillo que lo tenemos este fin de con nosotros asi que seguro que estaré entretenida jeje....